El otro día vi La Aldea y terminé de completar la filmografía de este joven director de ascendencia india. Por contar solamente con cinco películas, realizaré un breve recorrido cronológico por cada una de ellas.
Con Sexto sentido, no hace falta que a ninguno le cuenten el final a esta altura, el tipo la rompió. Todo el mundo hablaba de él y de esta película, que fue nominada al Oscar, tanto como su director y el jovencísimo Haley Joel Osment (ninguno ganó, por cierto). Todos los que vimos esta película quedamos impactados al darnos cuenta de que Bruce Willis estaba muerto (uups, y bueno...), del detalle del color rojo, de la escalofriante escena donde la nenita envenenada por su madre revela la verdad, de las uñas shoking de Toni Collette, etc.
Bueno, cuando salió El protegido (mala traducción para Umbreakable, literalmente, irrompible), todos esperábamos una segunda Sexto sentido, es decir, una película impactante y que diera que hablar. Tal vez ése fue el problema, porque la historia sobre el tipo que sobrevive a toda clase de accidentes no estaba mal... sólo que tal vez era menos sorprendente, no alcanza la vuelta de tuerca final para conseguir nominaciones al Oscar esta vez.
Ya con Señales M. Night se fue a la mierda, perdone el lector sensible mi escatológico vocabulario. ¡Esos extraterrestres, dejate de joder, por favor! Sí... la escena debajo de la puerta, pero nada más. Sí tenemos las espectadoras femeninas una motivación para verla: no, obviamente que no hablo de Mel -no como pechugas de pollo porque me salen tetas- Gibson, sino de Joaquin Phoenix.
La aldea.... ¡No me cerró! Demasiado suspenso, una historia demasiado rebuscada, vueltas de tuerca, de tornillo, de tirabuzón, ¿qué pasaba allí adentro, al final? Sí, me quedó claro que los monstruos eran de mentira (no menos falsos que los aliens de Señales, entre nosotros, por lo menos asustaban). Pero, y la aldea, ¿Qué es? ¿Es un manicomio, una cárcel, una reserva de humanos? Por favor, ¿alguien puede explicármela? En fin, con esta película, la crítica parece haberle perdido el cariño a M. Night.
Y llegamos a la recientemente estrenada La dama del agua, donde repite el protagónico la extraña y bella Bryce Dallas Howard -la cieguita de La Aldea, ahora en el papel de una ninfa (sic)-. Una vez aceptada la premisa de que se trata de un cuento de hadas contemporáneo, de que no, esta vez no hay locos ni alucinaciones ni muertos (bueno, sí, hay muertos pero están en el pasado del pobre Cleveland -conmovedor Paul Giamatti-), decía, una vez que nos relajamos y disfrutamos del cuentito, es una película linda. Con esto quiero decir, una de esas películas que te dejan más contento que cuando entraste al cine.
Bien, a esta altura, el lector se habrá dado cuenta de que no se puede esperar nada, o mejor dicho, se puede esperar todo, del cine de M. Night Shyamalan. Detalle: siempre hace aunque sea un bolo en cada película -se sacó las ganas de actuar en esta última-, a la manera de Hichcock. Y si bien su nombre no es garantía de buen cine, tampoco lo es del malo. Vaya a saber qué nos deparará en el futuro: su carrera parece ser misteriosa y enroscada como la trama de sus películas.
1 comentario:
mmmm, a mí no me terminó de gustar, y por contra me encantó la de El Bosque (traducción de aquí).
Bueno, cosidero que la ultima peli es un tanto inconsútil (que diría un exprofe mío de la Facultad), e incluso desacertada cuando intenta meter gotitas de humor. Se salva por Paul Giamatti.
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